Esta es la historia de un pequeño que navega a la deriva en el mar, en un frágil barquito de papel con la esperanza de encontrar un mundo amable que lo proteja. En la travesía encuentra a los seres del mar que lo acompañan en el camino y animan a buscar nuevos horizontes con los que soñar.

El recorrido se divide en tres escenas. En cada una de las paradas se narra una parte de la historia y se invita al público a que acompañen la travesía del pequeño niño.

El espectáculo se puede realizar sólo como pasacalles visual prescindiendo de la historia.
Espectáculo visual en el que los seres recorren las calles llenándolas de luz mientras los sonidos nos transportan a un mundo onírico donde los sueños se hacen realidad.
Seres etéreos, transparentes, vaporosos, gigantes y llenos de luz.
La luz que emanan sus cuerpos nos recuerdan la luz de las estrellas, de la luna y de los cuerpos que recorren a millones de kilómetros el firmamento; Vaporosos como las estelas de su movimiento; y gigantes para recordarnos lo pequeños que somos en el universo.